Interiorismo para pinkaholics
Hoy vengo al rescate de todos aquellos que, como yo, son pinkaholics y sienten la necesidad de incorporar rosa al decorar sus espacios. Amigos, lo primero que necesitan saber es que no están solos y que con conocimiento de causa y los argumentos correctos lograrán que su roomie, su pareja o su familia acepte con agrado que el rosa sea protagonista en sus espacios.
Muchos relacionan este color con lo romántico, dulce, femenino. Pero lo cierto es que el rosa se relaciona (al igual que el amarillo) con sensaciones de disfrute, alegría y calidez. Es un color muy versátil, sobre todo cuando jugamos con sus distintas tonalidades y lo combinamos con otros colores.
¿Quieres utilizar nuestro color favorito para decorar tu espacio? ¡Aquí te van algunos tips!

Una buena forma de introducir el color rosa, es a través de un solo elemento de impacto. El mismo será el “acento” en el espacio y te ayudará a darle carácter a la decoración. 😍
Una segunda opción es darle personalidad a tu espacio con pequeños toques. Cojines, cortina, alfombras, objetos decorativos. En la proporción correcta, no pasara inadvertido pero tampoco será el protagonista del espacio. Jugar con las tonalidades y añadir acabados distintos siempre ayuda a que el color rosa no sea un punto de foco sino un concepto.

Finalmente, lo más importante a la hora de incorporar el rosa en tu decoración es que sepas que efecto quieres causar, pues solo así sabrás como combinarlo😉
Algunas combinaciones ganadoras:
El uso del rose gold que ha estado en tendencia las últimas temporadas y los tonos pasteles y cargados de gris son tus aliados principales para hacer del rosa un color elegante y eficiente a la hora de decorar. Otra combinación ganadora es rosado Barbie con blanco y verde manzana pues convierte cualquier espacio en una zona juvenil y tropical

¿Listos para convencerlos? ¡Vamos, que no estás solo, amigo Pinkaholic!